Militares y civiles firman un acuerdo en Sudán para salir de la crisis
Los dirigentes militares y civiles de Sudán firmaron este lunes un primer acuerdo para poner fin a la profunda crisis política que sacude al país desde el golpe de Estado del pasado año, pero fue recibido con escepticismo por manifestantes.
El acuerdo, aplaudido por Estados Unidos y sus aliados, llegó tras múltiples intentos de sacar al país del bloqueo político desde que el general Abdel Fatah al Burhan le arrebató el poder a los dirigentes civiles, el 25 de octubre de 2021.
Ese golpe de Estado torpedeó una transición hacia un régimen civil, iniciada a raíz del derrocamiento del expresidente Omar al Bashir en 2019.
Desde entonces, se han celebrado manifestaciones contra el golpe casi cada semana, en medio de una profunda crisis económica y social, agravada por la violencia interétnica.
El acuerdo fue rubricado por el general Burhan, el comandante paramilitar Mohamed Hamdan Daglo y por varios grupos civiles, como las Fuerzas por la Libertad y el Cambio (FFC, por sus siglas en inglés), que fueron expulsadas del poder por el golpe de Estado.
La firma tuvo lugar en presencia del representante especial de la ONU, Volker Perthes, y del de la Unión Africana, Mohamed Belaish.
"La ceremonia de hoy es la culminación de los esfuerzos continuados de las partes sudanesas durante el último año, para encontrar una solución a la crisis política y restaurar el orden constitucional", señaló Perthes.
Estados Unidos, el Reino Unido, Noruega, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos, actores clave en Sudán, acogieron favorablemente el acuerdo, según un comunicado conjunto difundido por el Departamento de Estado norteamericano.
El acuerdo prevé el nombramiento de un primer ministro que estará al frente del país durante un periodo de transición de dos años.
Daglo insistió en el compromiso de los militares en abandonar la escena política, algo "esencial" para "construir un régimen democrático duradero", estimó.
Sin embargo, la iniciativa fue denunciada por centenares de sudaneses que se concentraron en Jartum para manifestarse contra lo que percibieron como una "traición". Las FFC "han vendido nuestra sangre", gritaron los manifestantes.
M.Arya--BD