Flamante presidenta de Perú prevé anunciar nuevo gobierno para aplacar crisis política
La flamante presidenta de Perú, Dina Boluarte, negocia este sábado contra reloj la formación de su gobierno, mientras que en las calles continúan las protestas exigiendo nuevas elecciones tras la destitución del exmandatario de izquierda Pedro Castillo, luego de su fallido golpe de Estado.
Boluarte, vicepresidenta hasta su toma de posesión el miércoles, prometió que este sábado daría a conocer su gabinete de "unidad nacional".
"La presidenta de la República debe tomar decisiones prontas, como por ejemplo su gabinete, y decisiones inmediatas para salir de ciertos apuros y generar confianza y tranquilidad", dijo el sábado José Williams, jefe del Congreso peruano dominado por la derecha.
"Pido calma a la población (...) Es un mal momento que le tocó pasar al Perú, pero tiene que ser superado de la mejor forma", señaló a la radio RPP, en sus primeras declaraciones desde que el Congreso destituyó a Castillo.
Boluarte prestó juramento como la primera mujer presidenta de Perú pocas horas después de que Castillo, quien enfrentaba una serie de investigaciones por supuestas prebendas en la repartición de contratos públicos, fuera destituido en una votación del Congreso.
Castillo había tratado de evitar esa votación, la tercera en su contra desde que asumió el cargo hace 18 meses, buscado disolver la Legislatura y anunciando que gobernaría por decreto. Pero sus órdenes fueron desacatadas por el Congreso y las Fuerzas Armadas.
"La Constitución había sido violada", indicó Williams el sábado al justificar la remoción de Castillo.
Tras su fracaso en instaurar el estado de excepción, Castillo fue detenido por su propia escolta mientras se dirigía a la embajada de México a solicitar asilo político y fue puesto el jueves en prisión preventiva por siete días. La fiscalía lo acusa de rebelión y, de ser hallado culpable, enfrentaría entre 10 y 20 años de prisión.
- Tres días de negociaciones -
Boluarte lleva tres días de negociaciones solo con líderes de las bancadas de partidos de derecha presentes en el Congreso, ante la defección de la izquierda a sumarse a las conversaciones.
La decisión de gobernar hasta el fin del mandato de Castillo, el 28 de julio de 2026, está en el origen de los nuevos problemas de Boluarte.
La demanda de nuevas elecciones se asocia con un abrumador rechazo al Congreso: según sondeos de noviembre, 86% de peruanos desaprueba al parlamento.
La aparente lentitud en la toma de decisiones de Boluarte destapó la olla de presión social, con marchas de regular magnitud y bloqueos de carreteras en demanda de nuevas elecciones y la liberación de Castillo.
Boluarte no descartó el viernes llamar a elecciones anticipadas en busca de una salida pacífica a la crisis política, e instó a la calma a la población.
- Protestas y fútbol -
Mientras tanto, la tarde del sábado la mirada estaba centrada en una marcha en Lima convocada por colectivos de estudiantes, trabajadores y partidos políticos de izquierda a partir de las 21H00 GMT, luego de que finalicen los partidos de cuartos de final del Mundial Catar 2022.
En el resto del país, los bloqueos de carreteras continúan por tercer día en las zonas surandinas del país donde Castillo, un exmaestro de escuela rural, goza del mayor apoyo. Sin embargo, los manifestantes no han crecido en número.
En las regiones Ica y Arequipa continuaban bloqueados varios tramos de la Panamericana, la principal carretera que atraviesa el país de norte a sur, dejando decenas de buses y camiones de carga varados.
En Lima, miles de manifestantes que intentaron llegar a la sede del Congreso el jueves y viernes fueron duramente reprimidos. La policía utilizó gases lacrimógenos para disolver la movilización que dejó algunos detenidos.
"Dina Boluarte no nos representa porque ella está de usurpadora, no la hemos elegido a ella", dijo a la AFP María Tolentino, un ama de casa que participaba en las marchas del viernes en Lima.
Los sucesos provocaron que la policía anunciara la suspensión de vacaciones y permisos de su personal hasta "nueva orden".
Por su parte, la fiscalía continuó interrogando este sábado a los exministros de Castillo por el presunto delito de rebelión.
El exjefe de Gabinete de Castillo, Aníbal Vásquez, anunció su "paso a la clandestinidad" por haber sido denunciado también por la fiscalía por el delito de rebelión.
En la base policial donde el expresidente está detenido por orden judicial, decenas de simpatizantes de Castillo realizaban una vigilia y olla común en solidaridad y reclamando su liberación.
H.Majumdar--BD