La justicia sueca rechaza la extradición de un periodista turco reclamada por Erdogan
El Tribunal Supremo sueco rechazó este lunes la solicitud de extradición formulada por Turquía relativa al periodista Bülent Kenes, que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, había puesto como condición para secundar la entrada de Suecia en la OTAN.
La alta corte, encargada de los recursos contra extradiciones, alegó que existen "varios obstáculos" para entregar a las autoridades turcas al periodista, al que Ankara acusa de haber sido cómplice en el intento de golpe de Estado de 2016, y de formar parte del movimiento del predicador Fethullah Gülen, archienemigo de Erdogan.
La Corte Suprema señaló su condición de refugiado en Suecia, también el hecho de que los cargos en su contra se relacionan con "delitos políticos" o con la seguridad del estado turco y, finalmente, el hecho de que ser miembro del movimiento del predicador Fethullah Gülen no es reprensible en Suecia, dijo en un comunicado.
"También existe el riesgo de persecución sobre la base de sus creencias políticas. Así que no se lleva a cabo una extradición ", dijo el juez Petter Asp.
Interrogado por AFP, el ex columnista del diario en inglés Today's Zaman dijo que estaba "contento" con la decisión, pero acusó al "régimen de Erdogan" de haber "fabricado las acusaciones" en su contra.
"Soy un periodista, no terrorista", afirmó, al tiempo que dijo estar "seguro de que el régimen usará otros métodos para hacer mi vida aquí lo más difícil posible".
Aparte de Hungría, que debe ratificar la adhesión de Suecia y Finlandia a principios de 2023, Turquía es el único país que amenaza con impedir la adhesión a la OTAN de los dos países nórdicos, decidida a raíz de la invasión de Ucrania por Rusia.
Ankara, Estocolmo y Helsinki firmaron un memorando de acuerdo durante la última cumbre de la OTAN en junio, pero Erdogan volvió a amenazar con bloquear la necesaria ratificación al día siguiente.
Durante una visita del primer ministro sueco, Ulf Kristersson, para convencer al jefe de Estado turco, se le preguntó a este último sobre las docenas de extradiciones exigidas por Ankara como parte de las discusiones.
El jefe de Estado turco había citado entonces un solo nombre como ejemplo: el de Kenes, de 53 años, a quien acusa de ser un "terrorista".
Las extradiciones de militantes kurdos o personalidades hostiles al régimen turco que se han refugiado en Suecia son el punto más delicado de las demandas formuladas por Ankara.
El Gobierno sueco subraya que la justicia del país nórdico es independiente, tiene la última palabra y que las decisiones ya adoptadas no pueden ser cuestionadas.
H.Oommen--BD