Ucrania pelea por Soledar pese a la situación "difícil"
El ejército ucraniano peleaba este jueves en Soledar pese a que la situación es "difícil" y los combates "feroces" en esta pequeña ciudad del este del país, que las fuerzas rusas tratan de conquistar para darle un giro favorable a su campaña militar.
"Los combates más feroces y más intensos continúan hoy (jueves) en la zona de Soledar", dijo a la prensa la viceministra ucraniana de Defensa, Ganna Malyar.
La viceministra agregó que "a pesar de la difícil situación, los soldados ucranianos están luchando sin descanso", para no permitir que las fuerzas rusas, compuestas sobre todo de mercenarios del grupo paramilitar Wagner, ataquen a continuación la vecina ciudad de Bajmut.
Soledar, conocida por sus grandes minas de sal, está a sólo 15 km al noreste de Bajmut, la gran ciudad de la zona, que las fuerzas rusas tratan de tomar desde el verano, sin éxito por el momento.
"Cada victoria es importante, sobre todo porque desde hace ya un rato no ha habido triunfos" del lado ruso, indicó el analista militar Alexander Jramchijin, refiriéndose a Soledar, una ciudad de 10.000 habitantes antes de la guerra actualmente arrasada.
El miércoles, el jefe del grupo Wagner, Yevgueny Prigozhin, se apresuró en afirmar que sus hombres controlaban Soledar, pero el ministerio ruso de Defensa y Kiev lo desmintieron rápidamente.
Este jueves, el Kremlin destacó "el trabajo gigantesco" y "las acciones heroicas" de los hombres de Wagner desplegados en primera línea.
"Queda mucho trabajo por hacer. No hay tiempo para detenerse y frotarse las manos", dijo ante la prensa el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov.
- "Estamos aguantando" -
"Rusia envía a miles de sus ciudadanos al matadero, pero estamos aguantando", insistió este jueves Ganna Malyar, quien se felicitó por "la resiliencia y el heroísmo" de las fuerzas ucranianas.
Desde el pasado verano, Rusia trata de tomar esta zona de la región de Donetsk, después de haber sufrido varios reveses que llevaron a su presidente, Vladimir Putin, a movilizar a cientos de miles de reservistas y a lanzar una campaña de bombardeos contra las infraestructuras energéticas ucranianas a modo de castigo.
Sin dar cifras, Malyar indicó que las tropas rusas que combaten en Soledar "están sufriendo elevadas pérdidas" en su intento "infructuoso" por quebrar la línea ucraniana de defensa.
Kiev no cifró el número de soldados muertos y heridos en la zona. Mijailo Podoliak, consejero de la presidencia ucraniana, habló el miércoles de "pérdidas significativas" en una entrevista con AFP.
En Bajmut, la doctora Elena Molchanova, de 40 años, sigue tratando a los últimos pacientes civiles que se han quedado en la ciudad pese a las bombas.
"No tenemos suficientes jeringas ni agujas para la insulina. Las reservas de medicamentos para el corazón se agotan muy rápidamente. Paracetamol tenemos, pero no curará a los pacientes", explica a AFP.
"Mientras haya gente aquí", asegura, no se plantea abandonar la ciudad.
Entre sus pacientes se encuentra Tetiana, una mujer que vino a buscar unas pastillas para su vecino de 81 años, sordo y ciego.
"No tiene noción de que hay una guerra y de que nos están bombardeando", cuenta.
- Sin objetivos nuevos -
Oficialmente, la reorganización se debe a la "ampliación de la escala de las misiones que deben realizarse y a la necesidad de una interacción más estrecha entre los componentes de las fuerzas armadas", según explicó el ministerio de Defensa ruso.
Pero en realidad, a Surovikin se le atribuyen las dificultades de las fuerzas rusas para avanzar en el terreno, la táctica infructuosa de los bombardeos sobre la infraestructura energética ucraniana -que no doblegó al gobierno de Kiev-, o el bombardeo ucraniano de Año Nuevo sobre Makéyevka, donde murieron al menos 89 soldados rusos.
"Vladimir Putin no ha hablado de nuevos objetivos", aseguró Peskov este jueves.
L.Panchal--BD