Rusia reivindica la conquista de Soledar, pero Ucrania lo niega
Rusia reivindicó este viernes la conquista de la ciudad ucraniana de Soledar tras una feroz batalla, pero Ucrania lo negó inmediatamente y aseguró que continúan los "intensos combates" por el control de esta zona del este del país.
"La tarde del 12 de enero se concluyó la liberación de la ciudad de Soledar, que es importante para el proseguimiento exitoso de las operaciones ofensivas" en la región de Donetsk, afirmó el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado.
El ejército ucraniano desmintió inmediatamente la pérdida de Soledar.
"Sigue habiendo intensos combates en Soledar", indicó a la televisión ucraniana el portavoz del mando oriental del ejército de Ucrania, Serguii Cherevaty.
"Las fuerzas armadas ucranianas mantienen la situación bajo control en condiciones difíciles", añadió.
Pocas horas antes, su viceministra de Defensa, Ganna Malyar, dijo que las "hostilidades continuaron" durante la noche y que fue "difícil".
"El enemigo lanzó casi todas sus fuerzas principales hacia (la región de) Donetsk y mantiene una ofensiva de alta intensidad", señaló Malyar en Telegram.
La toma de Soledar, que antes del conflicto tenía 10.000 habitantes pero que ahora está totalmente devastada, significaría una simbólica victoria militar para Moscú, después de los reveses sufridos por sus tropas desde septiembre.
Según el Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW, por sus siglas en inglés), una organización con sede en Estados Unidos que sigue los combates en tiempo real, "las fuerzas rusas probablemente capturaron Soledar el 11 de enero", es decir, el miércoles.
En apoyo de su afirmación, el ISW cita "fotos geolocalizadas publicadas los días 11 y 12 de enero" que "indican que las fuerzas rusas probablemente controlan la mayor parte de Soledar, si no toda, y probablemente han expulsado a las fuerzas ucranianas fuera de la periferia occidental de la ciudad".
Sin embargo, según el Instituto, la captura de la pequeña ciudad "no presagiaría un inminente cerco de Bajmut", a 15 kilómetros al suroeste de Soledar, y "no permitirá a las fuerzas rusas ejercer el control sobre importantes líneas terrestres ucranianas de comunicación" con la principal ciudad de la zona.
Los combates en Soledar y en sus alrededores han sido fuertes desde hace varios meses, pero su intensidad aumentó considerablemente en los últimos días.
El ejército ucraniano combate en esta pequeña ciudad conocida por sus minas de sal contra los mercenarios del grupo paramilitar ruso Wagner.
El jefe del grupo Wagner, Yevgueny Prigozhin, aseguró el miércoles que sus hombres controlaban Soledar, pero tanto el Kremlin -con quien mantiene una relación de rivalidad- como las autoridades ucranianas lo desmintieron rápidamente.
- "Queda mucho trabajo" -
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, prometió el jueves entregar todo el material militar necesario para defender Soledar y Bajmut, gran ciudad del este que también resiste desde hace semanas a la ofensiva militar rusa y que Moscú trata de conquistar desde el verano boreal.
El frente "aguanta", aseguró.
Sin presentar cifras, Mijailo Podoliak, consejero de la presidencia ucraniana, reconoció en una entrevista con la AFP que Ucrania ha sufrido "importantes pérdidas" en esta "sangrienta batalla", pero que eran "enormes" en el campo enemigo, lo que el Ministerio de Defensa ruso no confirmó.
Rusia lanzó su ofensiva sobre esta zona de Donetsk después de sufrir varios reveses que llevaron al presidente ruso, Vladimir Putin, a movilizar a cientos de miles de reservistas y a lanzar una campaña de bombardeos contra las infraestructuras energéticas a modo de castigo.
El ejército ucraniano dijo el jueves que había repelido ataques en más de una docena de localidades de la región.
"Queda mucho trabajo por hacer", dijo el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov.
Guerasimov sustituyó a Serguéi Surovikin, que había accedido a ese puesto hace tres meses.
El Consejo de Seguridad de la ONU tiene previsto reunirse este viernes a las 20H00 GMT para abordar la situación en Ucrania, once meses después del inicio de la invasión rusa.
V.Handa--BD