El jefe de la ONU dice que la situación en Etiopía se está "saliendo de control"
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, pidió el lunes el fin de las hostilidades en la región de Tigré, en Etiopía, donde la situación se está "saliendo de control", y reclamó la "retirada inmediata" de las tropas eritreas.
"La situación en Etiopía se está saliendo de control. La violencia y la destrucción han alcanzado niveles alarmantes", declaró Guterres a periodistas.
"Las hostilidades en la región de Tigré en Etiopía deben terminar ahora", agregó, haciendo un llamado a la "retirada y desafección inmediata" de las fuerzas armadas eritreas del territorio de Etiopía.
Los comentarios de Guterres se produjeron en momentos en que el gobierno de Etiopía prometió tomar el control de los aeropuertos y otros sitios en Tigré, ignorando un llamado de la Unión Africana para una tregua inmediata e incondicional.
El conflicto de casi dos años ha desatado una crisis humanitaria generalizada en la región y otras partes del norte de Etiopía, con al menos dos millones de personas expulsadas de sus hogares y millones más que demandan ayuda humanitaria.
Dijo además que las entregas de ayuda humanitaria en el Tigré se han detenido desde hace siete semanas y que se ha interrumpido la asistencia a las otras dos regiones.
"Todas las partes deben permitir y facilitar el paso rápido y sin trabas de la ayuda humanitaria para todos los civiles necesitados", resaltó Guterres.
"No hay una solución militar (al conflicto). Los civiles están pagando un precio horrible", agregó.
El alto diplomático pidió la reanudación urgente de las conversaciones para lograr un acuerdo político duradero.
"Naciones Unidas está lista para apoyar a la Unión Africana en todas las formas posibles para poner fin a esta pesadilla para el pueblo etíope", expresó.
R.Altobelli--BD