Sondeo pronostica holgada victoria del presidente Tokáyev en Kazajistán
El presidente saliente de Kazajistán, Kassym-Jomart Tokáyev, será reelegido de manera holgada, según un sondeo a pie de urna, en las elecciones presidenciales de este domingo, organizadas de manera anticipada tras un año marcado por sangrientos disturbios y luchas de poder.
Según un sondeo publicado tras el cierre de los colegios, Tokáyev, de 69 años, obtendría el 82,45% de los votos en esta exrepública soviética, en que acudieron a las urnas el 69,43% de los 12 millones de electores del país más extenso de Asia Central.
Además de Tokáyev, se presentaron en los comicios cinco candidatos irrelevantes.
Uno de ellos conseguiría el 5,2% de los votos, mientras que los otros cuatro no superarían el 3,33%, según el sondeo a pie de urna.
Los comicios se organizaron casi un año después de las protestas contra el alza del precio del carburante. La represión de las manifestaciones, que tuvieron lugar en enero, dejó al menos 238 muertos.
La memoria de esos hecho sigue viva y aún permanecen las tensiones. Las autoridades detuvieron el jueves a siete personas cercanas a un opositor exiliado, acusadas de haber intentado un "golpe de Estado".
Unas 15 personas se manifestaron en Almaty, la capital económica del país, para exigir elecciones libres, pero fueron detenidas por la policía, según la AFP. Un portavoz del Ministerio del Interior confirmó que 15 personas habían sido arrestadas.
"Lo principal es que no haya monopolio en el poder", declaró el mandatario saliente tras haber votado por la mañana en la capital Astaná.
No obstante la principal incógnita de la votación es saber si Tokáyev obtendrá más de 71% de los votos como en 2019. Un resultado contundente pero lejos del 98% obtenido por su predecesor Nursultán Nazarbayev en 2015.
Los comicios buscan afianzar el poder del presidente saliente, quien no ha permitido el surgimiento de la más mínima oposición.
En su campaña, prometió forjar "un nuevo Kazajistán", más justo y menos corrupto. Pero las dificultades económicas persisten, al igual que sus reflejos autoritarios.
- Esperanza y desilusión -
Llegado al poder tras la sorpresiva renuncia de Nazarbayev en marzo de 2019, Tokáyev abogó inicialmente por una continuidad de su omnipotente antecesor y mentor, antes de romper con él en el sangriento enero de 2022.
En ese momento, llamó a democratizar el país y a luchar contra su sistema oligárquico.
En el plano internacional, Tokáyev hace equilibrios entre Rusia, China y Occidente.
Tan solo este año recibió a los jefes de Estado de Rusia, Turquía y China, a altos dignatarios europeos y al mismo papa.
Ha criticado la invasión rusa a Ucrania, pero sin sumarse a las sanciones estadounidenses y europeas contra Rusia, principal socio comercial de Kazajistán.
Las promesas de apertura democrática y de reformas económicas han encontrado cierto eco en la población.
Amina Aïtjanova, una profesora de 46 años, cree por ejemplo que Tokáyev "manejó extremadamente bien la situación" tras las manifestaciones de enero.
Pero los comicios dan una sensación de algo ya conocido en un paisaje político desierto, con oposición de fachada y bajo presión de las autoridades.
El jubilado Aset Temirgalev cree que "no hay ningún candidato creíble" y que "no hay ninguna opción".
Alia Bokechova, una estudiante de 19 años, declaró a la AFP que no iba a votar porque era "una pérdida de tiempo, ya sabemos quien va a ganar y no conocemos a los otros candidatos".
Observadores electorales de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) lamentaron en un informe que sus recomendaciones "relacionadas con las libertades fundamentales y las condiciones de elegibilidad y de inscripción de candidatos" no hayan tenido seguimiento.
V.Ishfan--BD